Convocados para ser parte de una construcción
colectiva amplia, patriótica, federal y participativa, queremos compartir con
ustedes compañeros, la experiencia de pensar y diseñar el futuro de la
Argentina y dar continuidad al proyecto nacional y popular.
Bajo estas consignas estuvimos presentes
algunos compañeros en el encuentro organizado por el Grupo San Martín, liderado
por Julián Domínguez y denominado “El Futuro del Proyecto Nacional”.
La experiencia nos permitió compartir las
visiones de la realidad en una magnitud iberoamericana, como fue la disertación
de Mario Oporto, quien nos invitó a pensarnos desde el mestizaje
latinoamericano, para incorporar y dar sustento a los valores que traemos desde
nuestros antepasados.
Un sólido pensador y ejecutor de las políticas
peronistas, Alfredo Eric Calcáneo, nos trajo al presente la importancia de
contar con planes conductores como fueron las políticas implementadas por Juan
Domingo Perón durante sus distintas etapas de gobierno, las que tenían como
prioridad los intereses de la patria.
La juventud y entrega del empresario Matías
Gainza Eurnekian, nos invadió de optimismo y confianza para pensar y emprender
logros en nuestro propio suelo, creyendo firmemente en la fuerza del interior y
las capacidades de nuestra gente, dejando de lado la ficticia idolatría por lo
extranjero. Su juego es argentino, su apuesta es nacional y su proyecto en
nanotecnología convierte a la Nación
Argentina en uno de los siete países del mundo que cuentan
con esta producción.
Luego de una precisa síntesis de la realidad
política y una evaluación de la última década de gobierno kirchnerista, a cargo
del consultor Ricardo Rouvier, el padre villero Pepé Di Paola, nos conmovió con
la riqueza de valores, trabajo y cultura que encierran muchas de las villas
bonaerenses, elementos que bien podrían servir de ejemplo para la construcción
de una sociedad más justa y solidaria.
Más allá de estas pinceladas de lucha y defensa
de las convicciones políticas, Julián logró llegar a nuestra fibra con un
discurso inclusivo, participativo y continuador de un proyecto nacional. Con
una mirada ecuménica, pero desde los ojos de un profundo ser nacional, pudimos
identificar un líder con vocación de servicio.
Resultó así sencillo y entusiasta trabajar en
diversos talleres de discusión sobre las principales problemáticas nacionales,
las que requieren de nuestro aporte de ideas y voluntad de trabajo.
Queremos transmitirles el interés para sumarse a
este espacio político colectivo, que seguramente logrará instalarse como
propuesta nacional, dando el apoyo a un grupo comprometido y con ganas de
trabajar.
La simpleza de aportar a un espacio inspirado
en la vocación de servicio, la verdad y el compromiso con el otro; y la
convicción que nos guía para sumar a un proyecto tan simple y tan complejo como
es hacer bien las cosas, nos entusiasma y nos llama a participar.
Saludos a todos, espero les sirva y refleje lo
que vimos los días 16 y 17 de mayo en la ciudad de Mar del Plata.
Myrian Lorenzón y Luis Pernas.-